«Los versos de todos los poetas de la Grecia Antigua están recorridos de ritmos y rumores marinos, de estertores de olas; de las espumosas crines de los hipocampos, del brillo elástico de los delfines, de los centelleantes senderos líquidos, solares o lunares. La imaginación helénica del mar es copiosa y tonificante. Nos surte de<br>una memoria entrecruzada de barcos, de hombres y de dioses; de delfines miríficos, de golpes de remos, de vientos h...