El libro pretende adelantar, al amparo de múltiples voces enunciativas y bajo la compostura formal de un género mixto (es decir, a mitad del camino entre la narración ficticia y el ensayo inquisitivo), una reflexión sobre diversos aspectos que conciernen a la vida académica de una institución universitaria colombiana. Entre esos aspectos se destacan los siguientes: la noción de un plan de estudios, el concepto de microcurrículo, la ardua y compleja faena de la evaluación, la naturaleza de la investigación, el rito de la graduación, la mudable subjetividad de los docentes y estudiantes, el papel reservado a la lectura y la escritura en cualquier proyecto de formación profesional, etc. Y todo atravesado por la idea de que una educación reclame para sí el tributo de la calidad no podría ignorar, más allá de cualquier anacronismo, el legado de la enseñanza socrática.