A través de un acercamiento interpretativo al proyecto filosófico temprano de Martín Heidegger tal y como se configura en las lecciones que el filósofo impartió en Friburgo entre 1919 y 1923, la obra explora el sentido que tiene en el ejercicio filosófico la contratación con su dimensión histórica, es decir, la remisión y el compromiso que toda actividad filosófica tiene con su propia historicidad.