Frente al problema histórico de la inquisición española, este breve estudio viene a ocupar el sitio que otros libros, a pesar de su extensión, habían dejado vacío. Desprovisto de todo interés nacionalista y de cualquier celo religioso, el autor se ha propuesto aclarar la leyenda negra que la imagen popular y la obra de historiadores poco escrupulosos han tejido en torno a los actos famosos del tribunal. Con la misma decisión imparcial, el autor refuta a aquellos investigadores que, de una u otra manera, han tratado de justificar algunos de los procedimientos inquisitoriales. Este libro no contiene, pues, ni una defensa ni un nuevo ataque: se concreta a hacer un examen claro y sereno, apoyado en todos los documentos disponibles, acerca del origen, ilustrando la exposición con ejemplos tomados de los procesos de alguna de sus víctimas más ilustres.