Es tal la importancia que ha adquirido el poder político en nuestros días que la tendencia predominante es atribuir al Gobierno o al Estado la capacidad y por ende la obligación de resolver un amplio abanico de cuestiones. Este libro pone en cuestión dicha fantasía y sostiene que en la mayor parte de los casos la intervención pública no es la solución. Es el problema.El socialismo («de todos los partidos», que diría Hayek) insiste en que el merca...