Este libro reúne dos novelas cortas y un ejemplar de cuentos que ofrecen una lectura costumbrista donde la narración recae en una voz femenina, representada por ciertos estereotipos de época: ya sea la mujer resignada, amorosa y sumisa, o bien, aquella en vías de independencia económica y emocional, o, mejor aún, la que se sumerge en relatos de tono feminista, decidida a consumar su libertad. De esta manera, Mauricia Moreno recorre dos géneros literarios con historias de la vida cotidiana y relatos ficcionales donde el suspenso hace de las suyas.