<p>por Alfred Bekker<br><br><br><br><br><br>Vio cómo se elevaban las llamas, cómo las devoraban pedazo a pedazo. El hombre se detuvo un momento y dio un paso más. En su mano derecha aún sostenía el bidón de gasolina vacío, que ahora arrojó con un potente movimiento.<br><br>Cuando una fábrica de papel arde en llamas, el detective privado Aldo Burmester debe detener a un asesino .. .<br><br><br>Alfred Bekker es un conocido autor de novelas fantásti...