<p>El crecimiento imparable de los índices de criminalidad en Caracas, la sitúa en la cabeza de uno de los ranking más despreciables que existen: es una de las diez ciudades más violentas del planeta. Pero más allá del cómputo estadístico, herramienta esencial para comprender la magnitud del problema, la violencia adquiere representaciones emocionales concretas en la vida de quienes la padecen y que dan verdadera cuenta de la profundidad de una h...