<p>Escribir esta novela fue como navegar un océano de luces y sombras. Cada capítulo capturó la tensión de un mundo donde el éxito exige sacrificios, pero el amor reclama su propio espacio. Miguel, con su intensidad calculadora, y Cristina, con su fuego indomable, se convirtieron en más que personajes: son ecos de nuestras propias batallas, de esos momentos en los que debemos elegir entre lo seguro y lo que nos hace sentir vivos. Este libro es pa...