<p>¡Más tentadora que un helado!<br><br>Sorrel Amery estaba decidida a conseguir que la fiesta que iba a organizar fuera todo un éxito y sabía cómo llegar al corazón de la gente: ¡con sorbetes de champán! Era la estrategia perfecta, hasta que la dueña de la heladería se declaró en quiebra y desapareció, haciendo que sus planes se derritieran como un helado bajo el sol.<br>Ella solo quería recuperar cuanto antes su estabilidad laboral y emocional,...