<p>La lucha contra la droga, muchas veces desigual, la realizan diariamente las fuerzas de seguridad en la calle, los jueces en las cortes y, sin embargo, parece nunca terminar.<br><br>Unos pocos contaminados enquistados en diferentes lugares públicos y privados son los que permiten la circulación de todo tipo de estupefacientes. Entonces aparece la paciencia de los agentes policiales exponiendo su propia vida, y la firmeza de la justicia para fr...