<p>El pasado que me espera es un ejercicio de interpretación sobre los límites de las ciencias sociales para estudiar y representar el fenómeno religioso. La primera parte es producto de su trabajo de campo en los dos mayores altares de la Santa Muerte en el Valle de México, y el de la ciudad de Nueva York: es un ejercicio muy original de elaboración narrativa de la experiencia etnográfica, que muestra, como Wittgenseitn hubiese querido, los prob...