<p>He escrito esto para ti. Para que puedas conocer la verdad. Mi verdad, al menos. <br><br><br>Cristales rotos. Gritos. El viejo decide huir de todo eso y esconderse en lo que él denomina el Reino Hundido. Poco más que una cabaña cerca de un bosque, donde lidiará con su pérdida de audición y sus demonios internos. Algo que debería resultar sencillo hasta que un cachorro de rottweiler aparece en su puerta. Ese cachorro es de alguien, alguien que ...