<p>Un fenómeno viene sucediendo a lo largo del orbe con cierta frecuencia en los últimos siglos: la aparición de una bellísima mujer ?que no es de este mundo? que se presenta vestida de sol y coronada de estrellas, que de forma inesperada, en medio de estruendos luminosos, se le ve en cuevas, sobre árboles, en lo alto de iglesias o simplemente sostenida en el cielo; que hace nacer aguas curativas del suelo, danzar al sol, llover pétalos blancos y...