<p>En la entrada del templo de Apolo en Delfos, se podía leer la máxima «Conócete a ti mismo», que respondía a una de las preguntas que inquietaba a los filósofos de la antigüedad: ¿Qué es lo más importante que puede aprender el ser humano? El autoconocimiento era el requisito fundamental.<br>Con la idea de que los mitos pueden ser un camino para la introspección, y de que el Olimpo no es sólo un lugar mítico, sino un estado real de concie...