<p>La obra de Panait Istrati ha sufrido la censura política, las diatribas de la doctrina comunista de la que el autor renegó, la homofobia institucional y hasta mala suerte. El novelista, hijo de un contrabandista griego y una lavandera rumana, y de ese lugar del mundo donde Oriente y Occidente se tocan y conviven, tenía vocación de trotamundos, amigo de los desposeídos, enemigo de la injusticia: Roger Bartra dijo que era "el poeta de los vagabu...