<p>Aunque la historia del arte tienda a descuidar esa cronología, los célebres hermanos Van Gogh mueren con apenas seis meses de diferencia. En julio de 1890, se suicida Vincent, y en enero de 1891, tras una lenta agonía, marcada por el duelo y por un atisbo de locura, se apaga Théo. Había defendido con furia esos cuadros que no encontraban eco en el presente, y era el legatario de la obra y de su posteridad. Lo vencen la tristeza y la desesperan...