<p>El señor Sacramento Heredero ha mantenido por años algo que, dicho sin subentendidos malévolos, puede ser catalogado como "doble vida". Es así, es un hecho objetivo, no teñido de carga moral alguna. En efecto, a lo largo de su existencia ha logrado pulir, como si fuera una moneda sagrada, una reputación brillante de contador experto en asuntos tributarios. Es el lado visible de su luna. En su oficina, multiplicada como en espejos móviles por n...