<p>El mundo árabe ha sido siempre fuente de desconfianza e incomprensión para una parte importante de la población de Occidente. Los árabes fueron presencia constante en la Europa medieval, tanto por su importancia en la creación, conservación y transmisión del conocimiento como por los conflictos bélicos sostenidos. Después de la caída de Constantinopla, sin embargo, los pueblos de la región parecieron importar poco ante la mirada hegemónica de ...