<p>El autismo llega sin pedir permiso. Se acomoda en la silla de la cocina y pregunta qué hay de cenar. Nadie lo invitó pero, cuando llega a nuestra vida, nunca se irá. Nuestra convivencia con él tendrá innumerables etapas. Nos obligará a descartar lo conocido y entrar a un camino sin mapa, en donde la intuición y los pequeños detalles serán las llaves para esquivar las tormentas y alejarnos del lugar más oscuro del bosque.<br>La autora de este l...