El destino de la exclusión, pese a las apariencias, es la transmutación; y su identificación, como ocurre con el carácter mutante de algunos virus, resulta un tanto difícil. La exclusión es un proceso que se autoalimenta ampliando constantemente los márgenes; pero la propia dinámica que la mueve permite reconocer lo que hay detrás y la trama que la sustenta. Por eso la exclusión, más que un lugar habitado por ciertos grupos poblacionales, pasa a ...