El Adviento es la puerta de entrada al año litúrgico. Es un tiempo muy importante y merece la pena ser vivido con profundidad. El tiempo litúrgico del Adviento permite recordar algo tan fundamental como nuestra condición de criaturas nacidas del amor de Dios y orientados a este amor. Vivir profundamente este tiempo permite experimentar a Dios como un regalo sorprendente de amor y de ternura, manifestado en Jesucristo. Dios mismo quiere hacerse he...