Decía el maestro Lacruz que el Código civil español, como "hijo de su tiempo", es el Código de una España cuya población vivía en sus cuatro quintas partes alejada de la gran ciudad, el Código del consenso liberal-conservador, el Código que ignoraba los núcleos incipientes de proletariado industrial. Y también era el Código -puede añadirse- de unos españoles que no llegaban a viejos, y que cuando otorgaban testamento, tenían aún niños a su cargo,...