Los materiales de la evocación y lo onírico edifican este poemario esencial. Somos lo que recordamos, cómo lo recordamos, y una suma vital de obsesiones y deseos. Con una de las voces más personales y más alejada de las modas de la poesía española, vuelve Pelayo Fueyo en Extraña perspectiva a enfrentarnos a sus ?¿nuestras?? inquietudes: la infancia, el amor, la muerte o la identidad?Cada verso de este poemario se constituye en un hilo de Ariadna con el que el poeta nos guía por un territorio simbólico iluminado por su propia luz.«Tan sólo con nombrarte / ya te has manifestado en carne viva. / Yo no te he bautizado, / yo no te he liberado de fantasmas, / ni preparado para otra doctrina / que no fuera mi lema.»