En los primeros tiempos del cristianismo, el término «parroquia» hacía referencia a la comunidad de cristianos que habitaban en un lugar determinado, como otro grupo más de ciudadanos. Con todo, vivir entre los hombres nunca les hizo perder su condición de «peregrinos». Con el tiempo, la parroquia ha pasado a convertirse en una estructura fundamental para la Iglesia: gracias a ella la Iglesia de Dios se hace presente en un lugar concreto, en su s...