Vladimir P envejece a marchas forzadas aislado en un mundo poblado por los recuerdos de sus anos en el poder Para desprenderse del antano todopoderoso gran lider con todos los honores y horrores y no levantar sospechas entre sus subditos sobre su dificilmente disimulable demencia senil se le invita con sumo tacto a pasar el resto de sus dias confinado en una suerte de exilio vacacional entre los muros de su lujosa dacha al atento uy todo menos de...