Cuando Helena Maleno llego a Marruecos en 2002 con su hijo dos maletas y un proyecto laboral de tres meses no podia imaginar hasta que punto aquel pais y la lucha por los derechos de las poblaciones migrantes que lo atravesaban transformarian su vida para siempreYa instalada en Tanger de forma definitiva Helena se adentro en los asentamientos provisionales de los bosques que rodean Ceuta y Melilla y empezo a denunciar sin descanso las violaciones...