Cuando abrimos un libro de Pilar Pedraza a menudo entramos en un gabinete de maravillas. Abundan en sus novelas las colecciones de prodigios y los museos de lo incierto -como la cámara secreta de Imperatrice en La fase del rubí, o la exhibición simbolista en Lucifer Circus. Al franquear la puerta de Mystic Topaz, la tienda de gemas y productos esotéricos que da nombre a esta serie de relatos, penetramos también en un mundo donde descubriremos una...