Una gran parte de la Humanidad pasa hambre o está mal alimentada, lo cual constituye un escándalo y es indicio de una absoluta inhumanidad, porque disponemos de los medios técnicos y políticos que nos permitirían dar de comer al menos tres veces al día a todos los habitantes del planeta. No lo hacemos porque perdemos la sensibilidad para con nuestros semejantes, cuyo clamor no escuchamos y cuyas manos suplicantes desdeñamos. Uno de los sueños m...