Teoría general del estado. Tomo IEsta obra ofrece al estudio de las ciencias políticas, derecho y otras ciencias sociales y humanidades, una compilación del pensamiento político, social y jurídico acerca de la noción del Estado en sus diferentes acepciones y dilemas de su desarrollo teórico. Ente que ha sido objeto de estudio de diversas disciplinas; por lo que hay diferentes interpretaciones de sus características y funciones. Desde las aportaciones clásicas y liberales del Estado, a las contribuciones marxistas y las actuales a favor de la desestatización de la política, pasando por los realistas y críticos del Estado social, entre otros, el fenómeno estatal ha sido objeto de un análisis intenso en la medida que también se ha transformado. De ahí el énfasis para que el estudio del Estado tenga una visión actualizada y multidisciplinaria.El estado moderno implica la revisión de diversos filósofos, políticos e historiadores que, en su tiempo y contexto, identificaron la noción con la actividad de comunidades y ciertas formas de patrimonio como fundamento de la actividad política y de gobierno. Moderadamente al referirse a un conjunto de criterios y principios operativos que regulan la actividad, estructura y organización de la forma política, se concibió como órgano de producción y régimen jurídico y de gobierno.Hoy día la noción de Estado y de sistema político se utiliza indistintamente para hacer referencia a la organización y estructura política de la sociedad. Sin embargo, se reconoce a la democracia como uno de los modelos políticos que permite a una colectividad específica tomar conciencia de sí misma en un marco jurídico. Al concebir la política con diversos modos en que tanto ciudadanos, organizaciones, autoridades y el mercado interactúan y compiten por las preferencias de las mayorías; más específicamente, y en un marco jurídico, el concepto de Estado es considerado desde los diferentes sistemas políticos y electorales, en particular aquellos referidos a los procesos de transición, normalización y consolidación democrática.Esta obra ofrece al estudio de las ciencias políticas, derecho y otras ciencias sociales y humanidades, una compilación del pensamiento político, social y jurídico acerca de la noción del Estado en sus diferentes acepciones y dilemas de su desarrollo teórico. Ente que ha sido objeto de estudio de diversas disciplinas; por lo que hay diferentes interpretaciones de sus características y funciones. Desde las aportaciones clásicas y liberales del Estado, a las contribuciones marxistas y las actuales a favor de la desestatización de la política, pasando por los realistas y críticos del Estado social, entre otros, el fenómeno estatal ha sido objeto de un análisis intenso en la medida que también se ha transformado. De ahí el énfasis para que el estudio del Estado tenga una visión actualizada y multidisciplinaria.El estado moderno implica la revisión de diversos filósofos, políticos e historiadores que, en su tiempo y contexto, identificaron la noción con la actividad de comunidades y ciertas formas de patrimonio como fundamento de la actividad política y de gobierno. Moderadamente al referirse a un conjunto de criterios y principios operativos que regulan la actividad, estructura y organización de la forma política, se concibió como órgano de producción y régimen jurídico y de gobierno.Hoy día la noción de Estado y de sistema político se utiliza indistintamente para hacer referencia a la organización y estructura política de la sociedad. Sin embargo, se reconoce a la democracia como uno de los modelos políticos que permite a una colectividad específica tomar conciencia de sí misma en un marco jurídico. Al concebir la política con diversos modos en que tanto ciudadanos, organizaciones, autoridades y el mercado interactúan y compiten por las preferencias de las mayorías; más específicamente, y en un marco jurídico, el concepto de Estado es considerado desde los diferentes sistemas políticos y electorales, en particular aquellos referidos a los procesos de transición, normalización y consolidación democrática.El estado moderno implica la revisión de diversos filósofos, políticos e historiadores que, en su tiempo y contexto, identificaron la noción con la actividad de comunidades y ciertas formas de patrimonio como fundamento de la actividad política y de gobierno. Moderadamente al referirse a un conjunto de criterios y principios operativos que regulan la actividad, estructura y organización de la forma política, se concibió como órgano de producción y régimen jurídico y de gobierno.Hoy día la noción de Estado y de sistema político se utiliza indistintamente para hacer referencia a la organización y estructura política de la sociedad. Sin embargo, se reconoce a la democracia como uno de los modelos políticos que permite a una colectividad específica tomar conciencia de sí misma en un marco jurídico. Al concebir la política con diversos modos en que tanto ciudadanos, organizaciones, autoridades y el mercado interactúan y compiten por las preferencias de las mayorías; más específicamente, y en un marco jurídico, el concepto de Estado es considerado desde los diferentes sistemas políticos y electorales, en particular aquellos referidos a los procesos de transición, normalización y consolidación democrática.Hoy día la noción de Estado y de sistema político se utiliza indistintamente para hacer referencia a la organización y estructura política de la sociedad. Sin embargo, se reconoce a la democracia como uno de los modelos políticos que permite a una colectividad específica tomar conciencia de sí misma en un marco jurídico. Al concebir la política con diversos modos en que tanto ciudadanos, organizaciones, autoridades y el mercado interactúan y compiten por las preferencias de las mayorías; más específicamente, y en un marco jurídico, el concepto de Estado es considerado desde los diferentes sistemas políticos y electorales, en particular aquellos referidos a los procesos de transición, normalización y consolidación democrática.***Teoría de la ley penal y del delito. Tomo IILa teoría de la ley penal y del delito ha sufrido un sinnúmero de vicisitudes, El ilícito ha sido una constante de la humanidad, aparece a la par que ésta y sin duda, constituye uno de los más dramáticos problemas al que se enfrenta el ser humano.Los delitos tienen infinidad de conformaciones, causan daños irreparables, afectan terriblemente los más preciados valores, desde la vida misma hasta los esenciales aspectos del patrimonio, sin dejar de considerar cuestiones tan primordiales como la libertad sexual, la moralidad y el tan relevante aspecto de la seguridad de las personas; son múltiples los temas que necesariamente se deben ventilar en los ámbitos del derecho punitivo.Estudiar la ley penal es algo que no sólo compete a los abogados, sino a todos los ciudadanos; alguna vez en la vida, por desgracia, tenemos que desafiar al trágico problema de la violencia, de sentirse dañado por el abuso y la falta de respeto a lo que es y que debe ser inviolable. Es por ello que se debe estar preparado, entender bien las dimensiones de la ley penal, y por supuesto, del delito.Por lo anterior, esta obra puede ser consultada por todos, y debe formar parte importante aún de modestas bibliotecas, ya que su consulta es imprescindible.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.La teoría de la ley penal y del delito ha sufrido un sinnúmero de vicisitudes, El ilícito ha sido una constante de la humanidad, aparece a la par que ésta y sin duda, constituye uno de los más dramáticos problemas al que se enfrenta el ser humano.Los delitos tienen infinidad de conformaciones, causan daños irreparables, afectan terriblemente los más preciados valores, desde la vida misma hasta los esenciales aspectos del patrimonio, sin dejar de considerar cuestiones tan primordiales como la libertad sexual, la moralidad y el tan relevante aspecto de la seguridad de las personas; son múltiples los temas que necesariamente se deben ventilar en los ámbitos del derecho punitivo.Estudiar la ley penal es algo que no sólo compete a los abogados, sino a todos los ciudadanos; alguna vez en la vida, por desgracia, tenemos que desafiar al trágico problema de la violencia, de sentirse dañado por el abuso y la falta de respeto a lo que es y que debe ser inviolable. Es por ello que se debe estar preparado, entender bien las dimensiones de la ley penal, y por supuesto, del delito.Por lo anterior, esta obra puede ser consultada por todos, y debe formar parte importante aún de modestas bibliotecas, ya que su consulta es imprescindible.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.Los delitos tienen infinidad de conformaciones, causan daños irreparables, afectan terriblemente los más preciados valores, desde la vida misma hasta los esenciales aspectos del patrimonio, sin dejar de considerar cuestiones tan primordiales como la libertad sexual, la moralidad y el tan relevante aspecto de la seguridad de las personas; son múltiples los temas que necesariamente se deben ventilar en los ámbitos del derecho punitivo.Estudiar la ley penal es algo que no sólo compete a los abogados, sino a todos los ciudadanos; alguna vez en la vida, por desgracia, tenemos que desafiar al trágico problema de la violencia, de sentirse dañado por el abuso y la falta de respeto a lo que es y que debe ser inviolable. Es por ello que se debe estar preparado, entender bien las dimensiones de la ley penal, y por supuesto, del delito.Por lo anterior, esta obra puede ser consultada por todos, y debe formar parte importante aún de modestas bibliotecas, ya que su consulta es imprescindible.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.Estudiar la ley penal es algo que no sólo compete a los abogados, sino a todos los ciudadanos; alguna vez en la vida, por desgracia, tenemos que desafiar al trágico problema de la violencia, de sentirse dañado por el abuso y la falta de respeto a lo que es y que debe ser inviolable. Es por ello que se debe estar preparado, entender bien las dimensiones de la ley penal, y por supuesto, del delito.Por lo anterior, esta obra puede ser consultada por todos, y debe formar parte importante aún de modestas bibliotecas, ya que su consulta es imprescindible.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.Por lo anterior, esta obra puede ser consultada por todos, y debe formar parte importante aún de modestas bibliotecas, ya que su consulta es imprescindible.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.Cabe destacar que el derecho penal sufre una transformación fundamental a partir de la protesta airada que realiza César Bonesana, marqués de Beccaria, en el año 1764, en que publica su obra De los delitos y las penas, la cual es un grito de angustia contra el abuso de la autoridad. Con Bonesana se inicia el periodo humanitario del derecho penal, el cual, en alguna medida, tampoco ha sido la solución, en particular, frente a los grandes abusos de delincuentes.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.El criminal goza en la actualidad de excesivos, lo que obliga a pensar de manera prioritaria en la víctima del delito. Para favorecer a quien sufre las consecuencias negativas de la incesante criminalidad, resulta indispensable la lectura y análisis de la presente obra atinadamente denominada Teoría de la ley penal y del delito.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.***Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.Teoría general del proceso. Tomo IIIEl presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.El presente texto es una herramienta pedagógica dirigida a los estudiantes de la carrera de derecho, quienes en los inicios de su ejercicio profesional abordan el estudio de la teoría general del proceso y del género mayor postulado por el emérito Fernando Flores García: La teoría general de la composición del litigio.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.El interés de los autores por esta materia deviene desde 1983 cuando la cursaron con el profesor emérito Cipriano Gómez Lara, y desde entonces, de una forma u otra, han cultivado menesteres de la ciencia adjetiva.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.La obra comprende 30 unidades que cumplen con el programa oficial de la materia de la facultad de derecho de la UNAM y otras universidades como la Universidad Panamericana, donde Alberto Said e Isidro González imparten la asignatura.