María Carolina Hoyos Turbay tenía 18 años cuando se enteró por la radio de la operación autorizada por el entonces presidente César Gaviria para intentar liberar a su mamá, secuestrada por Pablo Escobar. Horas después, luego de un rescate fallido y frente al cuerpo sin vida de Diana Turbay, su hija le prometió que nunca más volvería a sonreír. Tuvieron que pasar muchos años, muchas lágrimas y mucho dolor para que María Carolinadecidiera incumplir...