«Hay dos horizontes contrapuestos: el campesino, modesto en la escala, limitado en la acumulación de capital, pero estable desde el punto de vista social, y el minero empresarial, ambicioso, devastador y respaldado incondicionalmente por el gobierno. Es hora de mirar con detenimiento las ilusiones de la locomotora minera que amenazaría la gran «fábrica de agua» que es el Macizo Colombiano surte el 70 por ciento de los acueductos del país y de neg...