Vivir es alternar responsablemente afirmaciones y negaciones, porque continuamente nos vemos obligados a escoger entre un objeto u otro, entre diferentes opciones de ocio, o entre una ruta vital u otra. Vivir implica elegir. Escoger implica elegir, discernir es un acto distinto de escoger. A lo largo de nuestras vidas, más que elegir, separamos. Las opciones que se nos presentan no son nítidas ni diáfanas cual sustancias químicas aisladas en sus ...