El debate en torno al aborto está dominado, invariablemente, por quienes se abocan a la defensa de la libertad de la mujer a elegir y a decidir sobre su cuerpo, contra quienes deciden abogar por el derecho a la vida de los no nacidos. Con independencia de los argumentos médicos, filosóficos o morales esbozados por ambas partes, es indispensable integrar en la constitución de cada país del mundo leyes que permitan definir el tratamiento que se dar...