Este libro tiene un doble mensaje. Para los mexicanos, la singularidad de su nación. Benito Juárez, liberal laico: Un Porfirio Díaz, que moderniza México durante 40 años. Y una revolución mexicana netamente popular. Y ese Leviatán que fue el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Y hoy tienen Estado, nación e identidad. Para el lector peruano lo mexicano será como un reproche, el envés de su retardo. Mi cuita es que ni Piérola ni Ramón Casti...