No es procedente "atrapar" el contenido de una obra como El cuarto asesino en una trama o argumento. Tiene más sentido indicar que su propósito es el de expresar ciertos momentos de la vida de Verónica, Julián el bello, Ulrike Van derWeiden, Tácito, Dumanoia, que existen más como posibilidades de mutación de identidades y de sentidos que como personajes o entidades fijas. Pero lo que sí puede señalarse con toda propiedad es la apuesta valiente p...