En 1876, Robert Louis Stevenson conoció a la norteamericana Fanny Osbourne, once años mayor que él, y prototipo de la «nueva mujer»: independiente, separada y con dos hijos. Cuando Fanny regresó a Estados Unidos, Stevenson, pese al escándalo familiar y a su ya precario estado de salud, decidió seguirla y casarse con ella. Tomó un barco de emigrantes en Glasgow y cruzó el Atlántico, y de esta ardua y arriesgada travesía dejó constancia en El emigr...