Gracias a las lúcidas reflexiones de Andrew Carnegie vertidas en estas páginas, podemos asistir al impulso inicial del capitalismo relatado por uno de sus primeros y más notables paladines. Y este fresco se nos muestra en su estado original, con todas sus luces y sombras.La defensa a ultranza de la competencia y el elitismo del talento que impregna esta obra —solo un selecto grupo de “ganadores” debe controlar el sistema—, puede ser considerado h...