Esta compilación, organizada desde la A (de abogado) hasta la V (de violencia), y extractada de las palabras que John Lennon dijo en entrevistas a distintos medios de comunicación y que escribió en las letras de sus canciones, permite recrear la manera como el Beatle vio, vivió y definió su entorno durante una época sorprendente de la segunda mitad del siglo XX.Del protagonista de este libro, el autor Gustavo Gómez Córdoba nos dice: «De todos los hijos de puta que en el mundo han sido, John Lennon fue el más hijo de puta. Lengua filuda, mente enfermiza, mirada de loco y alma embolatada. Defectos, todos: mentiroso, drogadicto, buscapleitos, borrachín, intolerante, obstinado, irascible, petulante, boquiflojo, fanfarrón, egocéntrico, grosero, homófobo, resentido, cruel, desconfiado, vengativo, machista (¡y feminista!), soberbio, altanero, necio, ingrato, violento, vanidoso, inhumano, cínico, inseguro, envidioso y rockero. «Yo era consciente de todos esos defectos antes de aceptar hacer este libro () Sabía que fueron precisamente los defectos de Lennon los que me acercaron a él. [Sí, pero recuérdese, tratándose de Lennon, los defectos son virtudes.] Lennon y yo siempre hemos estado juntos. He admirado a Paul McCartney, respetado a George Harrison y apreciado a Ringo Starr, pero a Lennon lo reclamo como propio».Del protagonista de este libro, el autor Gustavo Gómez Córdoba nos dice: «De todos los hijos de puta que en el mundo han sido, John Lennon fue el más hijo de puta. Lengua filuda, mente enfermiza, mirada de loco y alma embolatada. Defectos, todos: mentiroso, drogadicto, buscapleitos, borrachín, intolerante, obstinado, irascible, petulante, boquiflojo, fanfarrón, egocéntrico, grosero, homófobo, resentido, cruel, desconfiado, vengativo, machista (¡y feminista!), soberbio, altanero, necio, ingrato, violento, vanidoso, inhumano, cínico, inseguro, envidioso y rockero. «Yo era consciente de todos esos defectos antes de aceptar hacer este libro () Sabía que fueron precisamente los defectos de Lennon los que me acercaron a él. [Sí, pero recuérdese, tratándose de Lennon, los defectos son virtudes.] Lennon y yo siempre hemos estado juntos. He admirado a Paul McCartney, respetado a George Harrison y apreciado a Ringo Starr, pero a Lennon lo reclamo como propio».«Yo era consciente de todos esos defectos antes de aceptar hacer este libro () Sabía que fueron precisamente los defectos de Lennon los que me acercaron a él. [Sí, pero recuérdese, tratándose de Lennon, los defectos son virtudes.] Lennon y yo siempre hemos estado juntos. He admirado a Paul McCartney, respetado a George Harrison y apreciado a Ringo Starr, pero a Lennon lo reclamo como propio».