El mundo líquido y vital que se construye en esta novela, que por su flexibilidad y agilidad narrativa podría ser también un largo poema o una canción que nunca termina, empieza y finaliza en un mismo espacio: la casa-hogar-burdel de Germania de la Concepción Cochero. Así, como su nombre lo indica, la historia que leemos es, entre muchas otras cosas, una historia sobre el patio de los vientos perdidos: es decir, sobre un lugar abierto y cerrado a...