El autor nos invita a recuperar la búsqueda, nos incita, nos convida, nos impulsa a que juguemos a aprender, pero en un juego distinto al cual estamos acostumbrados: ocupar los tiempos y espacios del aula para dar (el docente) y consumir (el estudiante-aprendiz) conocimiento ya elaborado, sin posibilidades de decir que "no lo aceptamos" o que "quisiéramos probar otro" o "elegir nuestro propio alimento " ... pero no lo decimos porque, si lo hiciér...