Ruth, Jacob y Saúl entran al país por Puerto Colombia, atrás dejan los horrores que poco a poco van materializándose en Europa en la década de los treinta. Encuentran en el trópico frutas, colores, texturas y costumbres que se estrellan contra sus propias prácticas y perspectivas del mundo. Esta confrontación dibuja, a la vez, un país en que el que también se cocinan injusticias, desplazamientos y extrema crueldad. Bogotá, la ciudad que termina p...