Soñé hacer política como los clásicos la imaginaron, entendiéndola como la más noble de las expresiones de los hombres que viven en sociedad. Desdibujada esa utopía, decidí ser fotógrafa en blanco y negro revelando el negativo de los procesos electorales de los últimos 25 años en Colombia. Que el lector se aproxime a la lectura de este texto con la pasión que sentí al analizar cada proceso; todos atravesados por los cambios normativos electorales ocurridos desde la promulgación de la Constitución de 1991 en el contexto de violencia que padecemos. No saqué conclusiones; esas son de ustedes. En la fotografía en claro oscuro vi un partido liberal derrumbado, un partido conservador resquebrajado, partidos políticos emergentes y "golondrina"; un voto de opinión indicador. .. El voto cautivo se esfumó como las manifestaciones en plaza pública; en cambio, aparecieron las redes sociales, la proliferación de votos en blanco y nulos, y la lejanía de la democracia como la practicaron los griegos.