Edgard W. Said afirma que , pues quien lo vive o padece en sus diversas formas de transterración (desplazamiento, emigración, inmigración, éxodo, exclusión) lleva consigo una herida que no cicatriza jamás, una profunda sensación de pérdida, una . Sin lugar a dudas, la ficción que esta problemática suscita elabora el duelo del autor o del lector frente a las víctimas. Inscrito en los debates actuales, incita, a partir de la lectura de novelas, cuentos, poemas que atraviesan la historia de Colombia en los últimos cien años, a analizar y reflexionar sobre cómo los creadores de diferentes momentos han dejado constancia y testimonio, o han logrado que la ficción sea lugar para sujetos migrantes. El escritor que profetiza entra en diálogo con el que con perplejidad vivencia o explora hechos truculentos acaecidos en el país o en otros lugares de Latinoamérica y el mundo. El pasado se entrecruza al presente y el aquí y el allá entran en escena. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia.el exilio es la vida sacada del orden habitual, pues quien lo vive o padece en sus diversas formas de transterración (desplazamiento, emigración, inmigración, éxodo, exclusión) lleva consigo una herida que no cicatriza jamás, una profunda sensación de pérdida, una . Sin lugar a dudas, la ficción que esta problemática suscita elabora el duelo del autor o del lector frente a las víctimas. Inscrito en los debates actuales, incita, a partir de la lectura de novelas, cuentos, poemas que atraviesan la historia de Colombia en los últimos cien años, a analizar y reflexionar sobre cómo los creadores de diferentes momentos han dejado constancia y testimonio, o han logrado que la ficción sea lugar para sujetos migrantes. El escritor que profetiza entra en diálogo con el que con perplejidad vivencia o explora hechos truculentos acaecidos en el país o en otros lugares de Latinoamérica y el mundo. El pasado se entrecruza al presente y el aquí y el allá entran en escena. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia.esencial tristeza. Sin lugar a dudas, la ficción que esta problemática suscita elabora el duelo del autor o del lector frente a las víctimas. Inscrito en los debates actuales, incita, a partir de la lectura de novelas, cuentos, poemas que atraviesan la historia de Colombia en los últimos cien años, a analizar y reflexionar sobre cómo los creadores de diferentes momentos han dejado constancia y testimonio, o han logrado que la ficción sea lugar para sujetos migrantes. El escritor que profetiza entra en diálogo con el que con perplejidad vivencia o explora hechos truculentos acaecidos en el país o en otros lugares de Latinoamérica y el mundo. El pasado se entrecruza al presente y el aquí y el allá entran en escena. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia. Inscrito en los debates actuales, incita, a partir de la lectura de novelas, cuentos, poemas que atraviesan la historia de Colombia en los últimos cien años, a analizar y reflexionar sobre cómo los creadores de diferentes momentos han dejado constancia y testimonio, o han logrado que la ficción sea lugar para sujetos migrantes. El escritor que profetiza entra en diálogo con el que con perplejidad vivencia o explora hechos truculentos acaecidos en el país o en otros lugares de Latinoamérica y el mundo. El pasado se entrecruza al presente y el aquí y el allá entran en escena. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia.En otro lugar incita, a partir de la lectura de novelas, cuentos, poemas que atraviesan la historia de Colombia en los últimos cien años, a analizar y reflexionar sobre cómo los creadores de diferentes momentos han dejado constancia y testimonio, o han logrado que la ficción sea lugar para sujetos migrantes. El escritor que profetiza entra en diálogo con el que con perplejidad vivencia o explora hechos truculentos acaecidos en el país o en otros lugares de Latinoamérica y el mundo. El pasado se entrecruza al presente y el aquí y el allá entran en escena. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia. Estos análisis apelan a estudiosos la literatura, a culturalistas y profesionales de las ciencias humanas y sociales, pues ofrece diálogos complementarios para abordar este largo duelo que recae sobre nuestra historia.