Temas políticos e históricos, como la unión de naciones y la idea de progreso son tratados por el autor con el más apasionado rigor en este libro. Pese a que el pensamiento político del autor y sus meditaciones sobre la historia se le tienen como reflexiones de última hora sin relación mayor con su obra crítica central, si algo caracteriza al filósofo es su preocupación por este mundo y este mundo, hasta ahora se presenta envuelto en una atmósfera política.