El texto que el lector tiene entre sus manos, no es solo la introducción a otro texto: La lógica de la filosofía, de Éric Weil; es una especie de Postfacio colocado antes para dar inicio al filosofar. Es una propedéutica, un protréptico, una invitación a filosofar. Weil nos coloca en medio de la tensión esencial del ser humano. Podemos elegir entre el discurso coherente y la violencia; pero sucede que esta elección nunca es razonable, sino que es...