En el imaginario colombiano, las gentes de Antioquia tienen rasgos perfectamente definidos y algo similar ocurre con su gastronomía: todo el mundo reconoce que la arepa con queso, los frijoles con garra o la bandeja paisa son platos típicos de esa región. Sin embargo, pocas personas (cabria añadir; pocos estudiosos) podrían explicarnos de donde surgieron tan apetencias combinaciones culinarias. Este breve y enjundiosos volumen, Julián Estrada Ochoa no solo responde a esas preguntas sino que lleva sus indagaciones hasta el punto de la herejía: si esta claro, nos dice, que la cocina antioqueña es fundamentalmente una de origen campesino, o mejor, una cocina rural antes que urbana, ¿deberíamos seguir promoviendo platos como la bandeja paisa que desvirtúan esa tradición? Siéntese por aquí, apreciado lector. La polémica es tan sabrosa como unas migas de arepa con huevo.