La España contemporánea ha conocido algunos breves períodos en los que el tiempo histórico parecía acelerarse y las esperanzas apuntadas por los lentos procesos de modernización culminar en una época pletórica de realizaciones. La Segunda República, con sus audaces proyectos de cambio social y de democratización política, constituye un paradigma en tal sentido. Así como lo es también de la capacidad mostrada por las fuerzas de la sociedad tradici...