En este tiempo de globalidad líquida, el uso tradicional de la historia no parece servir para dar respuestas a la humanidad de nuestras inquietudes. Necesitamos apostar por una historia personal y propia, resultado de los intereses, las necesidades y las preguntas de cada uno, conjugada con una profunda convicción de respeto e incondicionalidad para con todos nuestros congéneres, de antes y de ahora....