Quien lea este estudio encontrará varias dramáticas verdades:La profesión de la abogacía está huérfana, en grado muy significativo, de ese ethos!Los sentimientos humanitarios, el amor por la justicia, el desprendimiento equilibrado, el deseo constante por la superación intelectual, la existencia de un humanista detrás de cada jurista, los impulsos creadores de nuevas doctrinas y soluciones a los problemas jurídicos, existen, pero de manera ya cas...